La procesión de tus dedos empuñados
cercando tus caminos navajados
sin dejar ver tu cuartel
de vida y de muerte a la vez
La procesión de tus dedos
caminan por tierras empapadas
por montes de leche envasada
que un crio deseará sacar
para alguna vez tomar
pero no en la cama
La procesión de tus dedos
reclutan por el camino
vasijas con miel
y en el centro pájaros
que militan bajo tus pies
La procesión de tus dedos
vienen de tus venas
te paga con una enagua de seda
y un bordado en la luna hiena.